La receta clásica de Milhojas

El Milhojas es un exquisito postre de origen francés que se ha ganado un lugar especial en la repostería mundial. Con su apariencia elegante y su combinación de capas crujientes y cremosas, el Milhojas se ha convertido en un verdadero deleite para los amantes de los postres.
La historia del Milhojas se remonta a la cocina francesa, donde fue creado por primera vez como una exquisitez para los paladares más exigentes. Su nombre, que significa "mil capas", describe perfectamente su característica distintiva: capas alternas de masa hojaldrada delicadamente crujiente y una suave crema o relleno entre ellas.
El Milhojas es apreciado por su equilibrio de texturas y sabores. Cada bocado combina la delicadeza crujiente de las capas de masa hojaldrada con la suavidad y la dulzura del relleno, creando una experiencia culinaria irresistible y gratificante.
Este postre sofisticado es adecuado para cualquier ocasión especial, desde celebraciones formales hasta reuniones informales. Su presentación impecable lo convierte en un centro de atención en cualquier mesa de postres, y su sabor indulgente satisface los antojos de los amantes de los postres más exigentes.
En resumen, el Milhojas es un postre elegante y delicioso que combina la delicadeza crujiente de las capas de masa hojaldrada con la suavidad y el dulzor del relleno. Si buscas una experiencia culinaria sofisticada y sabrosa, no puedes resistirte a un trozo de Milhojas, un verdadero placer que te transportará al mundo de la repostería francesa y te brindará una experiencia culinaria inolvidable.
MIRA EL VIDEO CON LA RECETA EXPLICADA PASO A PASO:
¿Como hacer Milhojas?
Ingredientes:
2 láminas de masa de hojaldre
500 ml de leche
4 yemas de huevo
150 g de azúcar
50 g de maicena
1 cucharadita de esencia de vainilla
Azúcar glas (opcional) para espolvorear
Paso 1
Precalienta el horno a 200 °C (390 °F) y coloca una lámina de hojaldre en una bandeja de horno forrada con papel pergamino. Perfora la superficie del hojaldre con un tenedor para prevenir su inflado durante el horneado.
Paso 2
Cubre el hojaldre con otra hoja de papel pergamino y coloca encima otra bandeja de horno para evitar que el hojaldre suba demasiado. Hornea durante unos 15-20 minutos, o hasta que el hojaldre esté dorado y crujiente. Retira del horno y deja enfriar.

Paso 3
Mientras tanto, prepara la crema pastelera. En una cacerola mediana, calienta la leche a fuego medio-alto hasta que alcance el punto de ebullición.
Paso 4
Mientras la leche se calienta, en un tazón aparte, bate las yemas de huevo con el azúcar hasta que estén bien combinadas y obtengas una mezcla espumosa.
Paso 5
Agrega la maicena a la mezcla de yemas de huevo y azúcar, y mezcla bien hasta obtener una pasta suave y sin grumos.
Paso 6
Una vez que la leche esté tibia, viértela gradualmente sobre la mezcla de yemas de huevo, removiendo constantemente para evitar la cocción de las yemas.
Paso 7
Regresa la mezcla a la cacerola y caliéntala a fuego medio-bajo, revolviendo constantemente con una cuchara de madera hasta que la crema espese y alcance la consistencia de una natilla.
Paso 8
Retira la cacerola del fuego y agrega la esencia de vainilla a la crema pastelera. Remueve para incorporarla por completo. Deja enfriar.
Paso 9
Una vez que el hojaldre esté completamente frío y la crema pastelera haya alcanzado la temperatura ambiente, es momento de armar el milhojas. Extiende una capa generosa de crema pastelera sobre la primera lámina de hojaldre.
Paso 10
Coloca la segunda lámina de hojaldre encima de la crema pastelera y presiona ligeramente para que se adhiera. Espolvorea con azúcar glas por encima para darle un toque de elegancia y un ligero dulzor.
Paso 11
Refrigera el milhojas durante al menos una hora para que se asienten los sabores y las capas se fusionen.

Conclusión:
¡Y ahí lo tienes! Un delicioso Milhojas casero que seguramente deleitará a todos los comensales. Sirve las porciones de milhojas en platos individuales y acompaña con una bola de helado de vainilla o una salsa de frutas frescas para realzar aún más su sabor. Este clásico postre francés es perfecto para ocasiones especiales o simplemente para darte un capricho dulce. ¡Disfruta cada bocado de esta maravilla crujiente y deliciosa!
Deja una respuesta